“La timidez”, explica la psiquiatra Ana Isabel Sanz para Cuerpomente, “es una actitud hacia el entorno y a las personas que nos rodean. Consiste en un sentimiento de incomodidad intenso, incluso con repercusiones físicas, cuando el individuo tiene que interaccionar con otras personas o cuando anticipa que puede estar expuesto a esa posibilidad”. 

Y sí, esta tensión que sienten las personas tímidas puede hacer que determinadas preguntas les resulten increíblemente incómodas. Es por eso que, si tienes un amigo tímido y quieres tener una buena relación con él, hay cierto tipo de preguntas que conviene que evites en la medida de lo posible.

¿Por qué eres tan tímido?

Mujer tímida
iStock

A las personas tímidas, nos explica la psiquiatra Ana Isabel Sanz, “no les gusta sentirse observados, ya que habitualmente se sienten juzgados”. Es por eso que acercarte a ellos con esta pregunta tan directa, incluso si no tienes malas intenciones, puede ser un gran error. Les harás sentir incómodos y no conseguirás acercarte a esa persona. 

 Y es que, como nos explica la experta, “en la relación con cualquier persona es esencial el respeto a las necesidades que expresa esa persona, no forzar su demanda de una determinada distancia ni hacer manifiestas sus dificultades en comentarios entre ellas”. Su conclusión como experta es que “lo más importante es ser comprensivo y no juzgarla”, y aunque no sea tu intención, con esta pregunta harás que esa persona tímida se sienta juzgada. 

¿Alguna vez lo pasas bien?

Las personas tímidas, nos explica la psiquiatra Ana Isabel Sanz, pueden tener una “excesiva necesidad de aprobación por parte de los demás para intentar (a veces sin éxito) sentirse cómodas”. Así que a veces, se descubren haciendo cosas que realmente no quieren hacer, intentando adaptarse a los gustos de otros y encontrándose en situaciones sociales que los hacen vivir emociones negativas “como tristeza o depresión, ansiedad, culpa, vergüenza, inferioridad o importancia”. 

Es por eso que si ves a una persona disfrutando a su manera, manteniéndose al margen o disfrutando de grupos más reducidos, no le saltes con esta pregunta. ¡Quizá disfruta a su manera, sin dejarse influir por la presión externa! 

Además, añade la psiquiatra, las personas tímidas tienen “mala tolerancia a las críticas”, algo que les afecta mucho a nivel persona, ya que “al ser muy susceptibles a ellas, tienen dificultades para entender, cambiar o crecer”. 

¿No te sientes solo? 

Esta pregunta puede ser muy delicada para las personas tímidas, porque, como nos explica la psiquiatra, “los tímidos no tienen por qué desear necesariamente no relacionarse con otras personas”. Sin embargo, su timidez puede convertirse en un “freno, un obstáculo y una fuente de malestar y limitaciones”, que pueden hacer que tienda a sentirse solo. “Su sentimiento de soledad es frecuencia y muchas veces real”, determina la experta. 

Esto, sumado a una “baja autoestima”, que hace que esta persona “se sienta inferior y no escuchada o valorada por los demás”, es el coctel perfecto para que con tu pregunta hagas estallar en mil pedazos el mundo interior de esa persona. Como si no tuviera suficiente que lidiar con sus inseguridades y su soledad no deseada. 

Lo mejor es que no tenemos por qué tomar esta actitud tan frontal para acercarnos. La experta recomienda “tomar la iniciativa en el establecimiento del primer contacto”, pero siempre desde un punto de vista que no haga sentir a la otra persona juzgada. De esa forma, en lugar de echarle en cara un dolor profundo como este, podemos “animar a la persona a enfrentar sus miedos de forma gradual mediante una actitud activa, y no agobiante, por nuestra parte, abordando temas no demasiado personales o comprometidos. 

¿En qué estás pensando? 

Está bien tomar la iniciativa con las personas más tímidas, porque como dice la experta, esta es la parte más difícil para ellos. Sin embargo, debes saber que a quienes padecen de una timidez extrema “les cuesta expresar sus sentimientos” y “no expresan abiertamente su opinión”, por lo que preguntarle en qué piensa cuando está algo alejado de la multitud no es una buena forma de integrarlo en el grupo. Lo más probable es que se bloquee. 

En su lugar, Ana Isabel Sanz nos propone “ofrecer un ambiente seguro y no juzgar sus miedos o inseguridades”, además de “promover condiciones favorables para que ponga en práctica y mejore sus capacidades de comunicación con los demás”. Traducido en la práctica, continua la experta, esto significa, “iniciar los turnos de palabra sin acarar nosotros el resto de la conversación, dejando espacio para que nuestro compañero intervenga sin presión ni prisas”. 

¿Por qué no te gusta la gente? 

Para acabar, debemos entender que las personas tímidas no son sujetos a los que “no les gusta la gente”. Sencillamente, “prefieren pasar desapercibidos, porque no les gusta ser el centro de atención”, nos explica Ana Isabel Sanz, y a menudo prefieren espacios más tranquilos para poder expresarse. 

Si te preocupa que tu amigo o amiga tímidos no se relacionen con más personas, ayúdales a romper el hielo y a conocer a otras personas dentro del grupo. Para hacerlo, la psiquiatra recomienda “actuar con calma y paciencia frente a los posibles silencios y bloqueos de la persona tímida”. Si ves que ocurre, que tu amigo se queda bloqueado, “toléralo sin hacerlo manifiestos o adoptar actitudes críticas u hostiles”. Así de sencillo.

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